El mundo automotor está en ebullición ante el inicio oficial de las pruebas en carretera del nuevo Mercedes-Benz G-Class Cabriolet, lo que confirma el regreso del icónico todoterreno descapotable tras un periodo de silencio. Tras una respuesta abrumadoramente positiva a los avances iniciales, Mercedes ha llevado con rapidez a sus prototipos a las vías públicas en Austria para evaluaciones dinámicas exhaustivas.
Esta nueva variante del Geländewagen descapotable está destinada a sacar a relucir una nueva era en el segmento de lujo de los SUV. A diferencia del descontinuado dos puertas con techo blando, esta versión será un descapotable de cuatro puertas, con un techo de lona retráctil operado eléctricamente. El diseño mantiene con orgullo el perfil cuadrado característico del G-Wagen y su formidable robustez, al tiempo que ofrece una experiencia de conducción abierta, emocionante y plena de sensaciones.
Los ingenieros de Mercedes-Benz están recopilando datos detallados para validar la rigidez estructural y el comportamiento dinámico del chasis sin techo. El exigente programa de pruebas se intensificará cuando los prototipos crucen a Suecia para enfrentarse a pruebas de invierno extremas. Este proceso de evaluación minuciosa busca garantizar que el Cabriolet ofrezca, en cualquier condición, la misma fiabilidad y capacidades que definen al G-Class.
Estas evaluaciones en condiciones de clima frío pondrán a prueba los componentes del vehículo, asegurando que la versión cabriolet mantenga la legendaria capacidad fuera de carretera y la durabilidad que han convertido al G-Class en un referente, independientemente del entorno meteorológico. Con las pruebas ya en marcha, se espera que la edición especial G-Class Cabriolet haga su debut oficial y llegue al mercado en 2026.
