Después de años de moda que pivotó hacia estrategias digitales tras la pandemia, se puede decir que el retorno del retail en persona ya está aquí. Las marcas están volviendo a aprovechar el poder del espacio físico para expresar plenamente su universo.
A la hora indicada, Diesel acaba de abrir las puertas de su último flagship en Kurfürstendamm, Berlín. El nuevo espacio no solo mostrará las últimas novedades de la marca en prêt-à-porter femenino, masculino, accesorios y una edición curada de piezas destacadas de las pasarelas, sino que también está diseñado como un centro inmersivo para la comunidad creativa de Berlín.
Situado en Kurfürstendamm 195, en la esquina de Bleibtreustrasse, este local independiente de dos plantas es una audaz colisión entre el brutalismo berlinés típico y la identidad visual distintiva de Diesel. Las sólidas bases de hormigón prefabricado dominan el conjunto, mientras que las vitrinas de producto, hiper-curadas, reflejan a la perfección el borde de lujo alternativo de Diesel.
En el corazón de la tienda hay una zona de denim digna de museo, con una instalación de color rojo intenso inspirada en el icónico logotipo biscotto de Diesel. Los códigos de la casa se integran mediante el uso de ilusiones trompe-l’œil y de un diseño anamórfico que convierte el espacio en un patio óptico.
En la planta superior, el foco se centra en la interacción. El piso sirve como un espacio modular de pop-up artístico que traerá un flujo intercambiable de energía cultural, diseñado para conectar con el pulso creativo de Berlín y fortalecer la comunidad Diesel mediante activaciones continuas.
Un lugar para comprar, claro, pero también un espacio para sumergirse, inspirarse y conectarse directamente con el universo Diesel.
Echa un vistazo a las imágenes de la tienda arriba.