Catalino (62) y Nicanor (58) son dos hermanos que viven en una precaria vivienda del Bº Itatí, sobre calle Amado Bonpland al 300. Los hombres viven en la extrema pobreza y sus vecinos piden ayuda.
“Los hermanos no tienen ningún ingreso económico, sólo viven de la solidaridad de la gente y se alimentan en los comedores comunitarios”, dijo uno de los vecinos. “Necesitamos que alguien los asista porque en estos días de frío están desamparados”.