Veamos algunos consejos naturales para que, si has sobrepasado los treinta, sigas conservándote bien de salud.
Mantener el peso ideal:
Según repetidos estudios de la Endocrine Society's, los hombres con sobrepeso son más propensos a tener niveles bajos de testosterona. ¡Olvídate de los azúcares!, los niveles de esta hormona masculina disminuyen después de ingerirla.
Reduce o elimina el consumo de alcohol y mantén un ritmo alimentario saludable: verduras, frutas, grasas saludables. Quédate con estos alimentos: ostras, huevos, carne de res, ajo y brócoli. Son los que se referencian como “promotores” de la producción de testosterona.
Hacer ejercicios regularmente:
Cálzate las zapatillas y saca fuerzas para ir al gimnasio. El sacrificio se recompensará con mejor salud y una mejora física, un atractivo que seguro se multiplica por la consecuente mejora de la autoestima. El ejercicio de alta intensidad aumenta los niveles de testosterona y la prevención de su deterioro.
Minerales como el zinc:
El zinc es importante para la producción de testosterona. Las carnes y pescados lo poseen; También la leche cruda, el queso crudo, frijoles y yogur o kéfir hecho con leche cruda.
Reducir el estrés:
Cuando un hombre sufre o esta estresado, su cuerpo libera altos niveles de la hormona de cortisol, un elemento que bloquea los efectos de la testosterona. Inteligencia emocional, meditación, yoga, saber reírse de sí mismo, dormir y descansar bien son algunas de las técnicas para mejorarlo.
Estímulos sexuales adecuados:
Una simple erección eleva los niveles de testosterona. Cuando te estimulas sexualmente los niveles de esta importante hormona se disparan; Y, por el contrario, no excitarte sexualmente durante largos períodos de tiempo disminuye sus niveles en la sangre y cada vez te será más difícil estimularte.
Alimentos que ayudan a producir testosterona:
Col, que reduce la producción de estrógenos, de manera que la acción de la testosterona sea más efectiva.
Aceite de oliva y huevos, cuyos contenidos en grasas omega y vitamina E estimulan la creación de testosterona y el consiguiente deseo de tener sexo.
Espárragos, que contribuyen a un correcto funcionamiento de los testículos gracias a su combinación de vitamina E, ácido fólico y potasio.
Nueces, que sí tienen un efecto directo sobre la producción de testosterona gracias a la presencia de vitamina E.
Ajo, que reduce la acción del cortisol, una hormona del estrés, y aumenta la disponibilidad de testosterona.
Miel, que estimula la acción de los testículos gracias al boro presente en ella. También la vitamina D y el Jengibre.
Otros alimentos, que, sin influir directamente en la producción de testosterona, permiten una mayor acción de ésta gracias a su acción vasodilatadora. En esa línea actúan todos los alimentos que contienen óxido nítrico o estimulan su producción natural: el chocolate, las nueces, el café o la sandía.
Fuente: Diario22.ar, Medline Plus y Archivo personal
Consultor Medico: Dr. Rene A. Triviño G. - M.P. 5812 - Medicina Integrativa