La madrugada del sábado, la negligencia en el parque Camba Cuá costó la vida de Juan Pablo Ramos, un joven de 21 años oriundo de Formosa, quien falleció ahogado en un piletón dentro de una casilla sin ninguna medida de seguridad. Ramos, estudiante de Comunicación Social, se encontraba en el lugar acompañado por una pareja amiga cuando, en busca de un lugar apartado para orinar, ingresó a una casilla que contenía una bomba de agua y un piletón sin ningún tipo de protección.
El resultado: una muerte completamente evitable que expone la irresponsabilidad de las autoridades municipales en la gestión de este espacio público.
A pesar de que las cámaras de seguridad del 911 registraron su ingreso a la casilla a las 2:38 de la madrugada, no fue hasta horas después, cuando su cuerpo fue encontrado sin vida en el fondo del piletón.
Este suceso evidencia la ausencia total de controles y medidas preventivas en el parque, especialmente en zonas de alto riesgo como la casilla donde ocurrió la tragedia. El municipio es directamente responsable de permitir que áreas peligrosas, sin cerramientos ni señalización alguna, sigan abiertas al público, mostrando una alarmante indiferencia por la seguridad de los ciudadanos.
El caso ha generado indignación en la comunidad, que exige no solo una investigación exhaustiva, sino también una revisión inmediata de la infraestructura del parque. Los vecinos exigen que el Municipio asuma su responsabilidad y cierre de una vez por todas las áreas de riesgo, implementando medidas de seguridad efectivas para evitar que esta tragedia se repita.