El verano llegará con escasez en materia de energía en toda la provincia, aunque en algunas localidades se sentirá con mayor fuerza. Pero no solo será problema la electricidad, sino aquellos elementos que dependen de la energía, por ejemplo el agua. Sin luz, no habrá agua.
Una de las cuestiones que preocupa hoy al gobierno provincial, es el abastecimiento de los servicios, y la forma de operar con el segundo acueducto, que se encuentra funcionando en un 25%.
En cuanto al agua, SAMEEP continuará con los trabajos diarios, de mantenimiento de las plantas, teniendo en cuenta que estuvieron descuidados por muchos años. "Vamos a garantizar que funcione lo que debe funcionar", indicó el presidente de la entidad, Nicolás Diez.
"Que las bombas funcionen como tal, que los tableros eléctricos estén adecuados para las circunstancias, y pedirle a la sociedad un esfuerzo que tiene que ver con al racionalización del agua"
Y añadió: "No vamos a tener la cantidad de agua suficiente que uno quiere tener".
El agua primeramente se potabiliza a la vera del río Paraná, en el riacho Barranqueras. Todo ese caudal de agua es elevado a la ciudad de Presidencia Roque Sáenz Peña donde es derivado, parte hacia Avia Terai y parte hacia Villa Ángela. "Todo esto se hace a través del uso de bombas eléctricas"
Sobre el río Bermejo hay cuatro plantas que potabilizan el agua, Puerto Lavalle, Presidencia Roca, San Martín y Las Palmas. "Vamos a tener serias dificultades en la provisión de energía eléctrica, el cual se nos va a hacer difícil mantener el caudal".
El acueducto es una obra que está en un 82% de avance, y se seguirá bregando por su finalización.
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