Es un cultivo originario de Asia, concretamente de Irán y Pakistán. Es una hortaliza muy antigua, y ya era cultivada por los sumerios 6.000 a.C. Los egipcios la conocían desde 5.000 a.C., apareciendo en pinturas murales. Los romanos y griegos la consumían, y fueron los primeros quienes extendieron su consumo por Europa y desde este continente se llevaron a América. Se cultiva sobre todo en Asia, con un 60% de la producción mundial; Los principales países productores son China, India, Estados Unidos y Turquía.
Entre sus capas esconde numerosas propiedades nutritivas y medicinales, es rica en minerales y oligoelementos (calcio, magnesio, cloro, cobalto, cobre, hierro, fósforo, yodo, níquel, potasio, silicio, cinc, azufre y bromo); y también en vitaminas (A, B, C y E).
La planta de la cebolla contiene esencias volátiles sulfurosas que le confieren su sabor picante tan característico; Uno de esos componentes se disuelve con rapidez en agua y produce ácido sulfúrico, de ahí que nos haga saltar las lágrimas cuando la cortamos.
Además, la cebolla contiene una sustancia volátil llamada alilo, con propiedades bactericidas y fungicidas. Es interesante su contenido en glucoquinina, una sustancia que baja el azúcar en sangre, por lo que también es conocida como la “insulina vegetal”.
Propiedades y beneficios de la cebolla:
Aliado para el resfriado: es excelente para reducir los síntomas de resfriados, catarros y bronquitis, la cebolla es un gran antiasmático, antiinflamatorio y bactericida, de hecho, suele ser parte de los remedios naturales más comunes o populares para curar la tos.
Ayuda a bajar de peso: por causa de su bajo valor calórico y su alto contenido de fibra, es ideal para incluir en la dieta.
Crecimiento: por su contenido de folatos, la cebolla es perfecta para las mujeres embarazadas y los niños, debido a que apoya el crecimiento del feto durante las primeras semanas de embarazo.
Diurético: permite eliminar el exceso de líquidos reduciendo así el riesgo de sufrir gota, cálculos renales e hipertensión.
Alivia la anemia: gracias a su aporte de fósforo, hierro, y vitamina E, la cebolla funciona como un alimento antianémico, también ayuda a resolver pérdidas de sangre y regenera los glóbulos rojos.
Salud mental: puede aliviar los síntomas de fatiga, ansiedad y depresión.
Sistema digestivo: evita el estreñimiento, la fermentación intestinal y la presencia de parásitos y hongos. También es una gran opción para aliviar digestiones pesadas y flatulencias.
Es prebiótica: promueve el crecimiento de bifidobacterias en el intestino y también priva el desarrollo de bacterias nocivas. Esto genera un gran equilibrio en la flora intestinal que al mismo tiempo disminuye el riesgo de padecer cáncer de colon.
Funciona como hipolipemiante: es decir reduce los niveles de colesterol y triglicéridos.
Antioxidante: porque cuenta con quercetina, la cual es un flavonoide con poderes antiinflamatorios y antialérgicos.
Favorece el sistema nervioso: su aporte de vitamina B y potasio, son claves para la transmisión y generación del impulso nervioso.
Mejora la circulación: gracias a que reduce el colesterol en la sangre y evita la formación de los coágulos previniendo la trombosis coronaria y otras enfermedades circulatorias.
Diabetes: debido a su contenido de glucoquinina puede funcionar como un tipo de insulina vegetal, así que combate la diabetes.
Lucha contra el cáncer: gracias a su contenido de antioxidantes.
Contraindicaciones o efectos secundarios:
Por su alto contenido en azufre puede causar ardor estomacal, por lo que no es recomendado en exceso para aquellas personas con problemas gastrointestinales, de reflujo o con patología renal. Los problemas de flatulencia y reflujo gastroesofágico, pueden evitarse consumiéndola cocinada en lugar de cruda o utilizando la cebolla tierna o cebolleta o las variedades de cebolla más suaves.
Algunas personas rechazan este alimento por el sabor y olor o por problemas de flatulencia, pero no podemos generalizar, pues estos efectos dependen de muchos factores individuales.
Las mujeres embarazadas deben consumir de forma moderada la cebolla debido a su acidez.
Fuente: Diario22.ar, Medline Plus y Archivo personal
Consultor Medico: Dr. Rene A. Triviño G. - M.P. 5812 - Medicina Integrativa