El insomnio es un trastorno del sueño frecuente que puede causar dificultad para dormir bien y tener un sueño de calidad. El insomnio no solo puede minar tu energía y estado de ánimo, sino que también puede afectar tu salud, desempeño laboral y calidad de vida.
Tipos de insomnio: Si lo clasificamos en función de su duración, podemos tener dos tipos: insomnio crónico e insomnio agudo. Mientras que, si lo clasificamos basándonos en el momento del sueño que aparece, tenemos el insomnio de conciliación, insomnio de mantenimiento, insomnio de despertar precoz, insomnio mixto e insomnio global.
Causas del insomnio en verano:
Durante el verano nuestros hábitos de vida y de sueño varían considerablemente. Incluso si no salimos de vacaciones, nuestra actividad cambia y hacemos cosas muy diferentes a las de nuestro día a día:
-Se trastocan los horarios de las comidas.
-Ingerimos cantidades de alimentos desproporcionados.
-Nos acostamos más tarde.
-Realizamos siestas de mediodía.
-Dormimos en colchones diferentes.
-Ingerimos más alcohol o bebidas refrescantes con estimulantes y en general estamos menos cansados a la hora de irnos a dormir.
-Los que son fumadores, tienden a fumar más por el hecho de estar en terrazas.
Las claves del insomnio de verano se encuentran en gran medida en el cambio de nuestra dinámica diaria habitual, como hemos visto en el apartado anterior. Pero aún hay más… la melatonina es la hormona encargada de inducir el sueño y solo se segrega cuando hay poca luz; Es la que avisa al cerebro de que es de noche y hay que ir a dormir.
El problema llega en verano y más si para nuestras vacaciones elegimos un lugar soleado (como hacemos habitualmente). Hay demasiadas horas de luz, demasiada claridad, lo que hace que nuestros niveles de melatonina disminuyan y sea más difícil conciliar el sueño. También influye la temperatura: a más temperatura corporal, menos producción de melatonina. En consecuencia, nuestras vacaciones se convierten en insomnio por la noche y cansancio por el día. Lograr un sueño de calidad es fundamental para un buen estado de salud físico y psíquico.
-Evitar las siestas largas (no más de 20 minutos).
-Evitar las bebidas estimulantes: café, té, refrescos con cafeína, etc. sobre todo horas antes de ir a dormir.
-Evitar beber alcohol en exceso 3 horas antes de irte a la cama.
-La cena debe de ser ligera, y de preferencia alrededor de las 9 pm.
-Un baño antes de acostarse ayuda a disminuir la temperatura corporal y relaja los músculos favoreciendo que sobrevenga el sueño.
-Intentar mantener una hora fija para irse a la cama y para levantarse.
-Ambiente de la habitación que invite al sueño: sin luz, silenciosa y una temperatura de unos 24 °C
-Se puede tomar Melatonina 30 minutos antes de acostarse; También algunas infusiones tibias de valeriana, tilo o pasiflora.
-Se pueden realizar técnicas de relajación y/o meditación.
Fuente: Diario22.ar, Medline Plus y Archivo personal
Consultor Medico: Dr. Rene A. Triviño G. - M.P. 5812 - Medicina Integrativa