La comunidad educativa de la escuela N° 4 Artigas, ubicada en el barrio Cordón de Montevideo, Uruguay, todavía no sale de su sorpresa y tristeza por la muerte de una maestra de 42 años que se descompensó estando en la institución.

El triste episodio tuvo lugar este jueves a la media mañana, cuando la maestra, Ivana Gissell Núñez Zamit, de 42 años, sufrió un paro cardiorrespiratorio dentro de las instalaciones de la Escuela ubicada sobre las calles Canelones y Salterain.

Según confirmó el diario El País, la maestra fue trasladada a su centro de asistencia médica, pero lamentablemente falleció sobre el mediodía, a pesar del trabajo de los médicos que la atendieron de urgencia.

Pero la polémica estalló porque Alfonso Larraya, secretario general de la Asociación de Maestros del Uruguay (Ademu) se quejó en una entrevista radial, porque las clases continuaron dictándose a pesar de la muerte de la maestra.

Obviamente que las compañeras de la mujer fallecida se quedaron muy conmocionadas por lo sucedido, pero tuvieron que seguir dictando las clases en la institución a pesar de lo que vivieron hace solo unos minutos atrás.

“La acción de la Dirección General de Educación Inicial y Primaria no fue la adecuada ante un hecho tan lamentable”, expresó sobre el hecho Larraya. De todos modos, este viernes no se dictaron clases en honor a la maestra fallecida.

Robert Silva, presidente de la Administración Nacional de Educación Pública de Uruguay, aseguró que “se acompañó y acompañará a la comunidad docente y familias. Hoy estuvo presente la propia Directora General de Primaria y mañana (por este viernes) no habrá clases. El equipo de Escuelas disfrutables también estará presente”, aseguró Silva.

Por su parte, la diputada colorada María Eugenia Rosselló, quien apuntó “malicia en el relato” de un usuario de Twitter quien aseguró que las autoridades no permitieron a los docentes suspender las clases y llamar a los padres para que fueran a buscar a los niños