Las coliflores tienen su origen en el Mediterráneo oriental, en los países de oriente (Asia Menor, Líbano, Siria, etc.). Se trata de un cultivo muy antiguo, y los egipcios ya la cultivaban en el siglo IV a.C. Sin embargo, no fue hasta el siglo XVIII cuando su cultivo se extendió considerablemente. El cultivo de esta hortaliza se realiza sobre todo en Asia, donde se obtiene el 75% de la producción mundial.
Cuando compre coliflor, busque cabezas firmes, sin manchas amarillas o marrones en la superficie. Coloque la coliflor de cabeza en un recipiente grande de agua salada fría durante 15 minutos para asegurarse que ha eliminado todos los insectos y pesticidas.
Beneficios:
Es muy rica en agua (más del 90%) y tiene un contenido bajo en hidratos de carbono y por lo tanto es poco calórica (18 kcal. /1000g.), y aproximadamente un 2% son proteínas.
Es una buena fuente de fibra, lo que colabora en la regulación del tránsito intestinal. Tiene un alto contenido en micronutrientes.
Gran aporte de vitamina C, similar al de un cítrico (47 mg. /100 g). También vitaminas del complejo B, especialmente ácido fólico y piridoxina; Vitamina A Y K (buena coagulación y salud ósea).
Entre los minerales sobresale el potasio y calcio (es una de las mejores fuentes vegetales), hierro y azufre en cantidades significativas, este último le da un sabor muy particular.
Posee colina, que es importante para la memoria, inteligencia, sueño y función muscular.
La ingesta de vegetales como la coliflor, el brócoli, los ajos, cebollas, etc. potencia los niveles de glutatión, un antioxidante importante para nuestro intestino y sistema inmune en general.
Contiene fitonutrientes antitumorales, como: indol-3-carbinol, el sulforafano y el isotiocianato de fenilo, que ayudan a prevenir el cáncer de próstata, ovarios, y cervical. Uno de los estudios más dramáticos que surgieron en enero de 2012 habla sobre la capacidad de la coliflor para prevenir el cáncer de próstata cuando se rosea con cúrcuma.
Hojas de coliflor. Son altamente depurativas, sus hojas son más rugosas, buena fuente de fibra, ayudan a quienes sufren de estreñimiento. Para batidos verdes, tortillas o salteados, la pueden picar muy fino, agregan aceite de coco, ajo y pimienta. Funciona como un relleno diferente para tacos o panqueques. Al calentar la hoja, se liberan una serie de sustancias antiinflamatorias y analgésicas que alivian la inflamación y el dolor Se deja actuar hasta que la hoja se enfríe y puedes repetir tantas veces quieras.
Precauciónes:
Las personas con hipotiroidismo deben evitar la ingesta de coliflor porque contiene compuestos bociógenos, responsables de su ligero sabor picante y de su aroma; Estos elementos tienen la capacidad de bloquear la absorción y utilización del yodo, con lo que frenan así la actividad de la glándula tiroides.
Fuente: Diario22.ar, Medline Plus y Archivo personal
Consultor Medico: Dr. Rene A. Triviño G. - M.P. 5812 - Medicina Integrativa