La historia del short se remonta a la época de los romanos, allá por el 50 a.C. En ese entonces, los gladiadores y también los soldados del ejército utilizaban los llamados “subligaculum”, una especie de calzoncillo que hacía las buenas de pantalón para poder luchar de manera más ágil y no sufrir las olas de calor que caracterizaban a esa zona.
A medida que se fueron “civilizando”, los pantalones cortos quedaron para los niños y los adultos tuvieron que usar sí o sí pantalones largos. Sin embargo, durante la Ilustración en Francia (1790’s), poco a poco los pantalones volvieron a acortarse. Para diferenciarse de los súbditos, los burgueses comenzaron a llevar pantalones ajustados (tipo calzas) que no pasaban de la rodilla.
Pero con el paso del tiempo, volvió a ocurrir lo mismo. La “civilización” llevó a pensar que usar pantalones cortos era signo de inmadurez y por eso regresaron los cortes largos. Los cortos volvieron a quedar para los niños y, esta vez, para algunos deportes. Esto siguió así hasta el final de la Segunda Guerra Mundial. Para la década del ’40, los hombres comenzaron a usar los pantalones cortos para los climas tropicales, pero de forma moderada.
Hasta aquí, ¡¡¡Las mujeres ni siquiera pensaban en usar pantalones!!! Después de la Segunda Guerra Mundial, comenzaron a usar los pantalones de jean largos. Pero recién a fines de 1960, casi 30 años después, las mujeres protagonizaron una de las grandes revoluciones de la moda. De la mano de la diseñadora Mary Quant, se creó el mini short, que marcó la revolución femenina y fue señalado como un símbolo fetiche. ¡Desde entonces, el short nunca dejó de ser tendencia en el mundo occidental!!!
Hoy existen cientos de estilos diferentes, que varían en el tipo de tela, los accesorios, y ¡hasta en el largo! Mientras que antes estaban un tiempo y volvían a ser largos, hoy los shorts son cada vez más minúsculos, hasta el punto de que se pusieron de moda unos llamados “cacheteros”, que son muy ajustados y dejan al descubierto la mitad de la cola.
Frescos, cancheros y súper combinables con cualquier estilo, los shorts son una de las prendas imprescindibles en el placard de toda mujer. Ya no es necesario que haga calor para usarlos: los shorts te acompañan durante Todo el año. Una prenda con historia y que hace historia cada vez que una mujer lo elige para vestirse.