En la mañana del 14 de noviembre, el intendente Luciano Demarco, de la pequeña localidad de Perico en la provincia de Jujuy, había solicitado licencia. Aludiendo “razones particulares”, Demarco aseguró que debía alejarse por dieciocho días y le solicitaba al concejal Walter Cardozo que asuma la intendencia interina.

Sin embargo, el Concejo Deliberante se vio obligado a rechazar su pedido. “Presentó su licencia basándose en el estatuto del empleado público. Lamentablemente para él, no es compatible con los funcionarios jerárquicos, por lo que el Concejo lo ha rechazado”, aseguró Cardozo. Unos días después, Demarco se escapó.

Las “razones particulares” de Demarco no eran otras que las de ir a presenciar el mundial de Qatar con sus amigos y acólitos del mundo de la política. Las fotografías de las redes sociales lo muestran en el avión, sonriendo y vistiendo la camiseta de la selección argentina. El escándalo, que afectó profundamente a la pequeña ciudad de Perico, no tardó en resonar en todo el país. “Tuvimos que asumir nosotros para no dejar acéfala a la municipalidad”, aseguró Cardozo sorprendido, quien ocupará el lugar de Demarco junto a la también concejal Anahí Juárez.

Aún no se ha tomado una determinación respecto a Demarco. La decisión del intendente fue tan sorpresiva como inesperada. “Ya veremos qué hacemos. Mientras tanto, nos ocupamos de los trámites y vamos resolviendo lo que se pueda”. Todo pareciera apuntar a que la insólita situación se mantendrá del mismo modo al menos hasta el 3 de diciembre, cuando Demarco decida volver de su viaje con amigos al mundial de Qatar. 

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