Se conmemora el día del nutricionista cada 11 de agosto por el natalicio del médico Pedro Escudero, fundador del Instituto Nacional de la Nutrición, a quien se le debe todo conocimiento acerca de las bases fundamentalistas de esta profesión. Este médico creó las Leyes de la Alimentación, normas relacionadas entre sí y que se complementan, para implementar con normalidad un plan alimentario, esas leyes son:
Ley de la cantidad: todo plan debe cubrir las necesidades calóricas de cada organismo. Por ello, debemos estimar el gasto energético del individuo para mantener su balance energético.
Ley de la calidad: todo plan debe ser completo en su composición, esto es, que debe aportar hidratos de carbono, proteínas, grasas, vitaminas y minerales. El valor calórico total debe tener una distribución adecuada y tener en cuenta, además, los alimentos protectores.
Ley de la armonía: refiere a la relación de proporcionalidad entre los distintos nutrientes.
Ley de la adecuación: la alimentación se debe adecuar al momento biológico, a los gustos y hábitos de las personas, a su situación socio-económica y a la patología que pueda presentar.
“Mejorar la salud de la sociedad. Acompañar al paciente a mejorar su calidad de vida, promover estilos de vida saludables, se acompaña en diferentes etapas biológicas del individuo, desde el lactante hasta la vejez.” – detalló la licenciada.
Dieta: palabra que a más de una persona le causará pánico, pero que no siempre deriva en eliminar completamente todo lo que uno consume constantemente.
Este término es común escuchar en los especialistas del área, como también en las personas que asimilan a un nutricionista con la palabra dieta. La misma hace referencia a la adquisición de una alimentación saludable, a la disminución progresiva de insumos que perjudiquen en cierta forma la salud y evitar así el riesgo de afecciones futuras.
Cuando una persona, por decisión propia o no, implemente a su estilo de vida una “dieta”, tiene que realizarlo siempre con bases médicas establecidas, es decir, que cuente con un especialista para que le asesore en la alimentación, y que lo acompañe durante ese proceso.
“Tenemos el compromiso de despejar, alertar o brindar mayor claridad a los mensajes erróneos que nos brindan las redes sociales, las aplicaciones digitales que están muy de moda.”- indicó Ayelén Quiña.
No todas las dietas o no todas las conductas son válidas para todos los organismos. Por ello es común escuchar que nutrición y actividad física van de la mano, aunque no en todos los casos eso pueda ser factible; todo depende del cuerpo y las condiciones físicas que acompañen al ser humano.
Si usted padece Síndrome de intestino irritable, hipertensión, divertículos, obesidad y sobrepeso, diabetes, colesterol elevado, triglicéridos, hígado graso, entre otras patologías que involucren tratamientos alimenticios, NO DUDE EN CONSULTAR CON SU NUTRICIONISTA AMIGO para que lo asesore de la mejor manera.